Decolorado cual atardecer enfermo, hepático por delirios del corazón
La vida avanza, el paso firme trasforma mi apariencia y me estruja el alma
El silbido del pájaro sin alas y el consejo del ángel delator se sobreponen a mi conciencia
Y estoy más gris, mas arrugado menos concéntrico en la inmensidad de la razón
Cualquier misterio que tus ojos me embelesan
Me mueven como hoja seca, que aun añora primavera
Las lunas con tus besos son eternas, pero si no apareces, ya nada me interesa
Te doy mi vida en un vasito del tamaño de un dedal
Tan poquito es el sorbo que tu boquita tiene que dar
Te juro que es muy dulce, pero si lo dejas añejar
Quizás se amargue un poco, pues a ese néctar le urge vivir en tu paladar
Cualquiera que te ame, empezaría a redactarte sin denotar bipolaridad
Pero yo no te amo, te idolatro, te sugiero eternamente en mi pensar
Y si digno no soy de la mustia caricia que ya no me quisieras regalar
Cualquiera que te ame, te aconsejaría no le llores, aquel que solo te supo amedrentar
Pues en tu vuelo, paloma negra, paloma querida, mujer divina y niña de mi aconsejar
No me dejes quererte tanto, pues en una de esas, tu tampoco me podrás olvidar