domingo, 23 de diciembre de 2007

Capitulo XII “Añorando la Irrealidad”


La escena era la siguiente :

El doctor Nibor Kooc, con un revolver en la mano, apuntando indecentemente
Sobre mi podrida cabeza, con una gesticulación, que le haría parecer mas, a un verdadero enfermo mental , en lugar de un especialista en degeneres psicológicos

-Al parecer esta trastornado- Se escucho una voz, a lo lejos (Bueno así parecía, pero en realidad venia del pasillo)

Entró a la habitación un opulento caballero, de traje negro, con bastón y un ojo de cristal púrpura, parecía el diablo personificado vestido por Chanel

Se acerco, muy despacio hacia el doctor, le dio unas palmaditas en la espalda y enseguida, el maniático con bata, soltó el arma, que tras de si, dejo un sonido hueco, como los nudillos al golpear un tronco de algún árbol viejo

Chasqueo lo dedos y de inmediato dos hombres, que mas bien parecían gorilas, o una especie de mutación, casi sacado de “El Planeta de los Simios”, solo que estos tenían un costoso smoking y lentes oscuros , llegaron y envolvieron, al que había sido mi mas cercano “amigo” en la “realidad”, que ahora estaba viviendo, en una apretada camisa de fuerza..

-Tu “Medico”, simplemente ha sido una prueba que te hemos colocado para ver como funciona tu mente a distintos campos de concentración, provocándote imágenes, de un mundo, o de un pasado, o un futuro, para hacerte perder la noción de todo lo que conoces, o has visto, o vivido- termino de decir aquel Hombre

-Por cierto, me puedes llamar Plaitas, soy el encargado de controlar tu irrealidad, aunque, bien, es verdad, fuiste sometido a tratamientos, para que tus pensamientos pudieran están en un nivel controlable y así ser de extremo provecho para nosotros , el escenario que te he hemos planteado aquí, es de lo mas “Ficticio”- Acabado esto Plaitas, esbozo una leve sonrisa

-¡Que Ironía!, ¿No Crees?, Hablar de algo ficticio, cuando tienes el poder de hacer cosas irreales, partes de una realidad muy severa, pero en fin- ¿Gustas una taza de café?-

Asentí tranquilamente, el Hombre del Ojo de Cristal púrpura me acerco una chaqueta un pantalón de cuero

-Presiento que te sentirás mas cómodo con esto-, esbozo de nuevo aquella fría sonrisa, tan maligna, quizás tanto como el mismo, lo de mas, no se si lo soñé, o me guiño el ojo de cristal

Pero antes de salir de ahí..
Había algo que me hacia falta

Me levante Bruscamente -¡¿Dónde Esta Mi Ángel?!-

1 comentario:

Pablo Sánchez dijo...

muy buen capitulo.....realmente llamativa la historia......interesante argumento..quizas la siga leyendo......depende del tiempo.....comenzare desde un principio