En la primera bolsa, la más pequeña
Quizás muevas botones pero, solo con mala compañía
Francamente me jodio aquella niña sureña
Su luz era muy intensa y la luna ya no salía
Me revolví la cabeza dentro de una licuadora eléctrica
Me encendí el Orto, por no pensar en
Me vi hablando de cosas que no entendía en la cocina ergonómica
Las patadas en el pecho, para mi son halagos
Dios, mi cabeza va a estallar, necesito besos
Lamentablemente me rendiré, aunque falten algunos textos..
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