miércoles, 30 de enero de 2008

volviendo al mar con la boca abierta





VOLVIENDO AL MAR CON LA BOCA ABIERTA

hay una edad de animales en calma

que hacen de los brotes

tiernas llamas

allí donde tu boca

dibuja una flor vencida

por la velocidad brutal

de un párpado insaciable

que deja intacta la memoria de los peces.

Tiembla la espesura de mayo

entre el algodón planchado

del porvenir

y las cigüeñas perpetuas

de los campos góticos

¡Qué fatiga locuaz, la de tus ojos!

guardando los rebaños

de los días felices

los basureros humeantes como sagrados volcanes

son doradas áreas

de aves marinas

que despedaza el cielo

hasta hacer del horizonte

un pez descorazonado

¡Cómo se tumban las tardes

a tus pies!

Haciendo de tu voz un regazo sembrado

en el que el pan del recuerdo

es un presente

recién hecho

Nos confunde el olor

de los labios arados

nadie echa de menos

la infancia incalculable

que los caminos y sus árboles

cazaban

¡benditas mariposas

de nuestro corazón cansado!