Tome mi mano del suelo, esa que creía perdida hacia tanto tiempo
La sacudí del polvo que la envolvía, encendí mi mente y salio mi rima
Las notas parecían brotar, pero había algo nuevo que antes pensé dejado atrás
Fueron esas pequeñas cosas que me hacían llorar, las que ahora tengo en un nunca jamás
Mostré un beso y me siguió corriendo, el pálpito del pecho me condujo a ti
A esta altura no se si salte o retrocedí, pero lo mas sincero es lo que nunca perdí
Fue la mojada lira, que me enseño el celo de quererte conmigo al anochecer
La desdicha de quedar austero de tu compañía y rezar para no palidecer
Hoy llego a mí esa ave que escapo de su claustro y se ha posado en mi hombro
Las luciérnagas de un ángel salieron a pasearse por mi cuerpo abandonado
Y me envolví en un mar de silencios y retrospecciones introspectivas archivadas
Recordé lo que nunca olvide, que te amaba aun cuando el cincel de la rutina…
Pretendía desmoronar mi corazón calizo de entendimiento
No se de donde salen las palabras, no comprendo como estremecer al viento
Pero tal parece, que el tal cual de cada quien se ha acostado a un lado mío
Y hoy te tengo, hoy sonrió, hoy doy vueltas en un milagro que se sentía oxidado
Nunca he dejado atrás pequeñas cosas, así como tu la mas delicada de mis rosas
Te he cuidado, te he querido con cada mal centímetro de un poeta envasado al vació
Tengo tiempo para decidir si el universo me mira escondido bajo la cama..
Pero prefiero no hacer nada, solamente dejar que el soplo de tus labios acabe con mi alma..
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