miércoles, 20 de febrero de 2008

Necio y con palabras secas

Sigues necio y con palabras secas…

Eres tan falso como el verde del cielo que acecha amenazante, tan mentiroso, odioso, cínico, desconsiderado. Portas un color de piel que ni existe. No mereces el nombre que crees refleja tu personalidad.

Mientes, creíste no lo notaría. Que sólo bastan “bellas” palabras para que creyeras entender lo que escribo, lo que hablo, lo que lees, que todo es negro, gris, triste, desolado. Dos líneas no dicen nada, mucho menos tu tan rimada muletilla.

(golpe)

Mi rostro cubre de sangre, mi cabeza arde incesante. Sigues necio, terco, no entiendes nada de lo que digo, repites lo de ayer, lo de mañana. Sordo. Cínico…

¿Aprenderás que no espero tus sucias palabras mintiendo?...

(golpe)

¿Qué no entiendes?, no puedo dejar de ver tu sombría risa, tu ingenua fantasía de hacerme creer que soy real. Tan falso reflejo de mi rostro ensangrentado.

(golpe)

Y sigues sin entender, sigues creyendo esa tonta postura tuya, arrogante, ingenuo. Realmente no entiendes nada…

Fija y sangrante mirada tuya que asechaba las noches, las mañanas, y rara vez cuando lavó mis dientes. Pero ya no, te fuiste de mi vista. Tu tan parecido a mí que tanto odio.

Ríes tembloroso por miedo a que descubran tu identidad. No crees lo que tus labios proclaman, tus palabras son huecas. Tu mirada fría delata lo intoxicado de tu piel.

Mentiroso, descuidado. ¿Qué haces aquí?

Tus pútridas palabras no valen nada, sólo ocupan espacio. ¿Qué acaso no entiendes?

No soportaba verte, no soporto… Descuidado, mentiroso, simplemente no cabes aquí.

Quedaste atrapado. Tu mirada sangrante, tu coraje ardiente encerrado en tan pequeños pedazos. Regados por todo el baño.

Sentí como tu vida era arrebatada.

Y ahora, me he quedado sin espejo.

No hay comentarios.: